Señor director:
En relación a la carta enviada por el señor Salvador Makluf Freig, presidente de la Fearab Chile, quien me acusó en la edición del sábado de La Tercera de xenofobia por los dichos que emití en contra del diputado Gustavo Hasbún, quiero expresar que mi intención fue distinta y que mis palabras están dentro del contexto de una confrontación que tuve con el diputado, quien me acusó de estar al límite de “pertenecer a la oposición”.
En el programa Hora 20 señalé a partir de un insert que “a Hasbún le faltó un letrero que dijera ‘se busca’, y que su imagen parecía de esas ruedas de prensa que uno ve por TV de Al Quaeda”.
Al percatarme de mis declaraciones poco afortunadas en contra del diputado, quien respondió que yo “despreciaba al mundo árabe y que mi intolerancia muestra mi verdadera faceta”, entregué mis disculpas públicas al legislador diciendo que “no tengo nada contra el mundo árabe al que admiro por su aporte al país”.
Agregué que “pido disculpas a quienes sin quererlo pude haber ofendido, incluido el diputado por La Florida”, pese a que yo jamás realicé un acto de racismo.
La acusación de xenofobia del presidente de Fearab Chile no tiene a mi juicio sustento alguno, en la medida que jamás ataqué el origen y raza del ex alcalde de Estación Central y nunca hice extensivo argumento alguno contra la inmensa comunidad palestina radicada en Chile.
Es más, el sábado, en un gesto que lo ensalza, el propio diputado Hasbún aceptó las excusas y me envió un twitter diciendo que “valoro mucho tu gesto, creo que reconocer los errores es de una valentía que no estamos acostumbrados. Un fuerte abrazo”.
Aprovecho así de cerrar una polémica sin sentido aclarando que mi estilo no es descalificar ni ofender personalmente y que mi causa es decir la verdad, estar al lado de la gente y no caer en polémicas inocuas, que no aportan en nada al desarrollo del país.
Manuel José Ossandón
Ex alcalde de Puente Alto
